El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONCYT) y la Secretaría Nacional de Ciencia y Tecnología (SENACYT) presentaron el informe Go SPIN a la Comisión de Educación, Ciencia y Tecnología del Congreso Nacional de la República, el cual fue elaborado por el Observatorio Mundial Sobre Instrumentos de Política en Ciencia, Tecnología e Innovación de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura –UNESCO-.
La información contenida dentro del estudio es de suma importancia para la implementación de la Política Nacional de Desarrollo Científico Tecnológico 2015-2032 elaborada por SENACYT, la cual se encuentra contenida dentro del Plan Nacional de DesarrolloK’atun: Nuestra Guatemala 2032. La presentación del informe estuvo a cargo del Dr. Guillermo Lemarchand consultor de UNESCO, con la participación del Dr. Fernando Quevedo Rodríguez, científico guatemalteco y Director del Centro Internacional de Física Teórica -ICTP- de UNESCO, con sede en Trieste, Italia.
Puedes ver el resumen del Informe AQUI.
Una de las conclusiones que se encuentran dentro del informe elaborado por el Doctor Lemarchand, es que actualmente Guatemala tiene 26 investigadores y científicos trabajando a tiempo completo por cada millón de habitantes, esto quiere decir, que el país cuenta con un total de 411 científicos e investigadores, mientras que los países que han alcanzado el desarrollo tienen un promedio de entre 5,000 a 7,000 por millón de habitantes. En Guatemala, el número de científicos/as por millón de habitantes es 16 y 262 veces más pequeño que el promedio en América Latina y los países desarrollados respectivamente. En las últimas décadas éste indicador ha disminuido en el país.
Guatemala no solo tiene un número muy reducido de investigadores, su principal limitación es el reducido número de titulados de Grado y Posgrado que se gradúa anualmente, tanto en ciencias exactas y naturales, como en ingeniería y tecnología. Este hecho se ve magnificado por el escaso número de posgrados (Maestrías y Doctorados) disponibles, tanto en la Universidad de San Carlos, como en el resto de las Universidades Privadas del país.

Para que las actividades de investigación e innovación puedan comenzar a influir en forma visible en la economía del país, el tamaño de la comunidad científica guatemalteca debería ser, al menos, unas 45 veces más grande (entre 1.000 y 1.200 investigadores a tiempo completo por millón de habitantes). Asimismo, aproximadamente el 50% de los investigadores debería estar realizando tareas de investigación e innovación dentro del sector productivo del país.
“El objetivo principal del informe es contar un punto de partida que nos indique como estamos y hacia dónde tenemos que dirigir los esfuerzos como país para lograr el desarrollo tecnológico y científico, el cual esté enfocado en generar soluciones a los problemas que tenemos actualmente. La política Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico contiene cuatro ejes: Formación de Capital Humano de Alto Nivel, Investigación Basada en Demandas Sociales y Productivas, Innovación y Transferencia de Tecnología, y Popularización Científico-Tecnológica. Tenemos que trabajar de manera conjunta con varias instituciones del Estado como lo es el Ministerio de Educación y el Ministerio de Economía entre otros, para lograr los cambios y motivar a los jóvenes y niños a interesarse en los campos de la investigación, las ciencias puras y las ingenierías; que como se señala dentro del informe, son de suma importancia para lograr el desarrollo de un país” comentó el Doctor Oscar Cobar, Secretario Nacional de Ciencia y Tecnología.